Lima- Perú. En Fiestas Patrias, cuando todo el mundo celebra el aniversario de la independencia, en Ayacucho, cientos de actores recrean una historia que se remonta a los tiempos del incanato. El Vilcas Raymi.
La fiesta del Vilcas Raymi es la historia de una batalla entre los Chancas e Incas y se escenifica en la ciudadela inca de Vilcashuamán, ubicada en el distrito del mismo nombre.Esta batalla culmina con el triunfo de las tropas quechuas. El Inca toma posesión del lugar e instala su centro administrativo más importante de la región. Es en ese momento en que el Inca, en lo alto del Unzo (un trono ritual levantado en lo alto de una pirámide), realiza una ofrenda al Sol y ejecuta otros ritos.
Según la tradición oral, Vilcashuamán debe su fundación al inca Pachacútec. Él, al vencer a los chancas (señores de la región hasta su llegada), decidió construir una ciudadela que mostrara a los vencidos el poderío de su incipiente imperio. Escogió el lugar por encontrarse en el camino hacia el Cusco y también por estar en la región donde nació su hijo más querido, Amaru Yupanqui.Para el visitante, el montaje se asemeja al Inti Raymi, que se escenifica en Cusco. El Inca aparece rodeado de un impresionante séquito compuesto por las collas, sacerdotes y generales. Detrás de ellos aparecen los soldados.
VilcashuamánEl lugar es uno de los atractivos mayores que tiene Ayacucho. El actual poblado se asienta sobre una llacta o ciudadela inca con más de 500 años de antigüedad. Aunque existen varias casas contemporáneas que se han construido sobre muros prehispánicos, todavía es posible apreciar la belleza de la arquitectura inca.
Al llegar a este pueblo lo primero que llama la atención son los restos de los templos del Sol y de la Luna, encima de los cuales se ha edificado una iglesia colonial. Esta mezcla de épocas es una constante en Vilcashuamán, donde las huellas de la ocupación inca deben convivir con las necesidades de la población actual.
Sin embargo, al subir las escalinatas de estos templos y apreciar desde otra perspectiva las construcciones aledañas lo que más salta a la vista es la herencia inca. Aún se puede adivinar los contornos de una plazoleta trapezoidal donde se realizaban sacrificios. (Andina)
La fiesta del Vilcas Raymi es la historia de una batalla entre los Chancas e Incas y se escenifica en la ciudadela inca de Vilcashuamán, ubicada en el distrito del mismo nombre.Esta batalla culmina con el triunfo de las tropas quechuas. El Inca toma posesión del lugar e instala su centro administrativo más importante de la región. Es en ese momento en que el Inca, en lo alto del Unzo (un trono ritual levantado en lo alto de una pirámide), realiza una ofrenda al Sol y ejecuta otros ritos.
Según la tradición oral, Vilcashuamán debe su fundación al inca Pachacútec. Él, al vencer a los chancas (señores de la región hasta su llegada), decidió construir una ciudadela que mostrara a los vencidos el poderío de su incipiente imperio. Escogió el lugar por encontrarse en el camino hacia el Cusco y también por estar en la región donde nació su hijo más querido, Amaru Yupanqui.Para el visitante, el montaje se asemeja al Inti Raymi, que se escenifica en Cusco. El Inca aparece rodeado de un impresionante séquito compuesto por las collas, sacerdotes y generales. Detrás de ellos aparecen los soldados.
VilcashuamánEl lugar es uno de los atractivos mayores que tiene Ayacucho. El actual poblado se asienta sobre una llacta o ciudadela inca con más de 500 años de antigüedad. Aunque existen varias casas contemporáneas que se han construido sobre muros prehispánicos, todavía es posible apreciar la belleza de la arquitectura inca.
Al llegar a este pueblo lo primero que llama la atención son los restos de los templos del Sol y de la Luna, encima de los cuales se ha edificado una iglesia colonial. Esta mezcla de épocas es una constante en Vilcashuamán, donde las huellas de la ocupación inca deben convivir con las necesidades de la población actual.
Sin embargo, al subir las escalinatas de estos templos y apreciar desde otra perspectiva las construcciones aledañas lo que más salta a la vista es la herencia inca. Aún se puede adivinar los contornos de una plazoleta trapezoidal donde se realizaban sacrificios. (Andina)
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